Parece que la tradición de poner tapa con la cerveza, se está instalando de manera más o menos habitual en Santa Coloma, son buenas prácticas que hay que agradecer y difundir y para eso estamos por aquí. Seguro que si se mantiene y consolida el poner tapita con nuestras cervezas, vendrá algún cazador de tendencias para bautizarlo con un nombre de origen inglés y ponerlo de moda entre modernos. (Aviso, Tapping, ya está cogido)
Había oído hablar mucho del Chayanne, pero la verdad no había tenido la oportunidad de ir hasta el otro día que, por casualidades de la vida, me encontré con un antiguo compañero de trabajo que hacía tiempo que no veía y después de intercambiar dos o tres frases, decidimos echar una cervecita. Al final cayeron tres.
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| Detalle del WC |
El bar en realidad, se llama la Lluna y está en la calle Camprodón esquina con Jacinto Verdaguer. Local pequeño pero aprovechado, dos televisores planos en cada extremo te permitían ver el documental que se estaba emitiendo en algún canal de pago desde cualquier punto. En las paredes, fotografías caseras de bocatas, cosa que hace que te hagas una idea exacta de lo que puedes comer. La plancha, no está escondida, está allí justo en la barra cerca de unas paletillas de jamón. El techo es bajo, un sitio así acumula quieras o no grasa, pero el bar está limpio y ordenado. El baño, al fondo como en cualquier sitio, detrás de unas cortinas de tiras encontramos el lavabo y a izquierda y derecha tenemos el váter de hombre y mujer respectivamente, limpio, muy limpio, teniendo en cuenta que la mayoría de parroquianos son hombres, mayores y faltos de puntería.
Lo llevan una pareja de pakistaníes que te atienden nada más entrar por la puerta con una sonrisa. Él, (Chayanne) nos puso la primera ronda; he de decir que he tenido que usar google imágenes para ponerle cara al Chayanne autentico y sí, se parece bastante, un poco más moreno y con el pelo más corto.
Nada más servir las copas, Chayanne se fué al extremo de la barra a cortar unas tiras de jamón que colocó encima de un trozo de pan sin tomate, jamón de batalla, pero aceptable.
El tomate, se lo puso a la segunda tapa, que era de chistorra, pero en rodaja, sabrosa en general pero fría. Si vas a poner algo que se presume caliente, no lo sirvas frío amigo. La tercera nos las sirvió ella, con patatas bravas calentadas allí delante nuestro en el micro. Que nadie se escandalice, podéis sospechar que son recalentadas o refritas de cualquier bar que os sirva unas patatas en menos de diez minutos.
En general, he de decir que es un sitio recomendable para hacer un aperitivo, llámalo aperitivo, llámalo brunch, si eres un moderno de mierda. Mi antiguo compañero me aseguró que a partir de la tercera ronda empezaba el festival, pero tenía cosas que hacer por la tarde y no es plan de ponerse tontorrón a mediodía de un día cualquiera entre semana, además después de una tercera cerveza todo parece más bonito y se pierde objetividad.
Precio por quinto 1,1€
Bar la Lluna
C/ Camprodon 24-36
Dom-Jue: 8:30-23:00
Vie-Sab: 8.30-23:30
martes descanso semanal
Como siempre es un bar de diez o era de diez, parece que con el tiempo se olvida de la gente que se gasta dinero en su bar y no es capaz de invitar a dos chupitos después de cien euros de cuenta, y por cierto era un bar de diez por que como buen mesero le importa cero la vida de la gente y cia do pasas a ser chafardero y poner tapas frías como de bravas ahí has perdido la esencia del bar y pasas a ser como cualquier mesero de cualquier calle de mala muerte qie solo le importa el ingreso y no se preocupa por su clientela. Uno que no irá nunca más y cliente perdido
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